Frivolidad

Si algo nos demuestra esta crisis tan dura es el nivel de frivolidad con el que algunos de los que nos gobiernan se refieren a ella y a quienes sufren sus efectos. ¿Cómo es posible tan poca empatía, tan poca decencia, tan poco escrúpulo, tanta desvergüenza, tan poco compromiso con la ciudadanía? Esto, más aún que la crisis (que ya es decir) es lo que irrita y revuelve a la gente. Una gente que ha pasado de la indiferencia al enojo y la indignación. hacia los políticos.